Llamada
Llamada | |
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Relacionado con | Vorinismo |
Mundo de origen | Roshar |
Universo de origen | Cosmere |
En el vorinismo, una Llamada es una profesión o campo de estudio al que una persona dedica su vida con el fin de complacer al Todopoderoso.[1]
Creencias
De acuerdo al vorinismo, aquellos que mejor cumplan sus Llamadas durante su vida serán convocados por el Todopoderoso en la vida más allá de la muerte para servir en la Guerra por el Cielo.[2] Entonces, las habilidades de cada persona relacionadas con su Llamada son altamente aumentadas: por ejemplo, un granjero puede hacer crecer grandes campos de cultivo con un gesto de la mano y un lancero puede crear truenos y rayos con su arma. Cualquiera que no sea elegido simplemente dormirá hasta el final de la guerra.[3]
Cumpliendo las necesidades del la Guerra por el Cielo, ser un soldado es considerada la mayor y más honorífica Llamada, al menos en la cultura guerrera alezi;[2] los fervorosos enseñan que cualquier Llamada es noble y puede permitirle a uno ser elegido por el Todopoderoso, con la agricultura siendo especialmente necesaria,[4] pero aquellos de otras Llamadas sienten que son mucho menos valorados que los soldados.[4][5]
Filosofía
El objetivo de la Llamada es ayudar a la gente a que se mejoren a sí mismos y capitalizar sus talentos individuales lo mejor que puedan, lo que el vorinismo ve como una manera fundamental de adorar al Todopoderoso (ya que esos talentos fueron proveídos por el Todopoderoso en un primer momento).[6][7]
Kaladin, mientras es un hombre del puente, reflexiona sobre los agujeros de la idea, preguntándose si él y los otros hombres del puente, quienes no tienen la libertad de hablar con fervorosos y seguir Llamadas de su propia elección, podrían ser forzados por el Todopoderoso a continuar el terrible trabajo de correr con puentes después de la muerte.[3] Más tarde, incluso cuando está en muchas mejor condiciones de vida, se siente frustrado por las discrepancias entre el sueño y la mejora personal fomentada por la religión y las restricciones puestas sobre los ojos oscuros por la sociedad.[7]
Process
People can choose Callings at a young age,[2] including while they are teenagers or younger.[1] Although the choice is a personal one, it still does have to fit with Vorin norms of propriety when it comes to rank and the masculine and feminine arts.[8] For example, low-ranked lighteyes can reasonably choose archery as a Calling, but being an officer is out of reach.[9] Changing one's Calling is accepted but uncommon.[2]
Along with a Calling, each person chooses a Glory, which is an aspect of the Almighty to emulate.[2] Although it often makes sense for a person's Glory and Calling to be related, they don't need to directly reinforce each other.[6]
Once someone chooses a Calling and a Glory, they work with ardents of the appropriate devotary to regularly set and fulfill relevant personal goals.[2] As a mark of achievement when their goals have been reached, a person can Elevate and reach Points in their Calling and Glory. Doing so requires the presence of an ardent and presumably some kind of evaluation, such as a test of the person's abilities.[8][2][3]
Being an ardent may itself be a Calling,[2][6] but there are ardents with other Callings, such as cooking.[10]
Known Callings
- Dalinar Kholin: being a leader[2]
- Shallan Davar: natural history[1]
- Adolin Kholin: dueling[2]
- Elhokar Kholin: possibly being a ruler or leader[11]
- Kabsal: possibly being an ardent[6]
- Kadash: being a soldier and (later) possibly being an ardent[2]
- Janala Lustow: music[2]
- Ashir: cooking[10]
Notes
- ↑ a b c El camino de los reyes capítulo 3#
- ↑ a b c d e f g h i j k l El camino de los reyes capítulo 18#
- ↑ a b c El camino de los reyes capítulo 59#
- ↑ a b El camino de los reyes capítulo 16#
- ↑ Palabras radiantes capítulo 41#
- ↑ a b c d El camino de los reyes capítulo 33#
- ↑ a b Palabras radiantes capítulo 44#
- ↑ a b El camino de los reyes capítulo 7#
- ↑ Palabras radiantes capítulo 82#
- ↑ a b El camino de los reyes interludio I-8#
- ↑ Palabras radiantes capítulo 23#