Aric
| Aric | |
|---|---|
| Oficio | Guardia |
| Residencia | Piedralar |
| Mundo natal | Roshar |
| Universo | Cosmere |
“Parecían Portadores del Vacío, de verdad que sí, con unas cosas así como huesos grandotes saliéndoles de la piel. ”
—Aric, sobre los cantores huidos[1]
Aric es un guardia ojos oscuros en Piedralar, Roshar.[1]
Apariencia y personalidad
Es bajito y lleva un viejo casco picado de herrumbre.[1] Va bien afeitado y tiene los ojos marrones muy juntos.[2] Intenta hacerse el duro,[2] pero se pone nervioso cuando hay peligro.[3]
Atributos y habilidades
Lleva una maza, pero no es hábil en combate.[3][2] Kaladin comenta que tiene menos aplomo que un mensajero.[1]
Historia
Guardia de Roshone
Al comienzo de la Auténtica Desolación, Aric trabajaba como guardia de Toralin Roshone e informaba al capitán de la guardia, un ojos claros.[1] Formaba parte del grupo que encerró a los parshmenios del pueblo en una habitación de la mansión de Roshone cuando les llegó la advertencia de la tormenta eterna.[4][1] Cuando después de la tormenta los guardias fueron a comprobar cómo estaban los parshmenios, una de las paredes había sido derribada y los parshmenios habían desaparecido. Aric fue testigo de cómo los parshmenios escapaban, y notó que habían cambiado físicamente.[1]
Tras la llegada de la tormenta eterna, Kaladin se apresuró hasta Piedralar, pero no llegó hasta que la tormenta ya había pasado. Aric descubrió a Kaladin mientras el chico investigaba el alojamiento de los parshmenios. Los dos hombres no se conocían y Aric lo obligó a entrar en la mansión.[3] Luego, Aric intentó intimidar a Kaladin y llevarlo ante Roshone, pero Kaladin escapó fácilmente del guardia. Aric encontró a Roshone, quien reconoció a Kaladin.[3] A continuación, Aric fue testigo de cómo Kaladin golpeaba a Roshone antes de revelar su hoja esquirlada.[3][2]
Aric le contó a Kaladin la huida y transformación de los parshmenios, informándole que no habían atacado a nadie. Arci quería saber si Kaladin informaría a Elhokar sobre la ayuda que necesitaba el pueblo para hacer frente a la destrucción de casas y graneros que había provocado la tormenta eterna. Estaba preocupado por la disponibilidad de comida y refugio ante la llegada de las altas tormentas, dada la cantidad de refugiados en la localidad.[1]
Ocupación cantora
Durante la ocupación cantora de Piedralar, a Aric y al resto de antiguos guardias de Roshone se les prohibió portar armas. Ayudaban a Lirin a mantener a los nuevos refugiados organizados en hileras y, en secreto, vigilaban quién llegaba a la ciudad. Aric formó parte del engaño que Lirin montó ante los Fusionados cuando Dieno enne Calah llegó a Piedralar, trayendo una litera para transportar al general de forma segura sin levantar sospechas.[5]