Editors
571
ediciones
{{for|asedio de Luthadel|más información}}
Tras la muerte del lord Legislador, Sazed se marchó de [[Luthadel]] para cumplir con su deber como guardador y difundir el conocimiento de la época previa a dicho tirano a la gente del Imperio Final. Portaba todo el conocimiento del pueblo de Terris, pero su especialidad era la religión, particularmente aquellas anteriores al Imperio Final.{{book ref|mb2|4}} Se fue al sur, la dirección de donde Kelsier pensaba que provenían las historias del
Observó que la tierra estaba llena de caos, muerte, odio y desorden ahora que el lord Legislador ya no vigilaba esos lugares. Sazed se decepcionó al percatarse de que la gente esperaba que volviese al trono y de que no entendieran ni se preocuparan lo suficiente por aprender una nueva religión, por lo que decidió enseñarles cosas más prácticas. Después de que pasara el año y de que continuara tanto el desapego de la gente como el rechazo de su pueblo, Sazed empezó a cuestionar los resultados de la rebelión.{{book ref|mb2|7}} También se topó con misteriosas muertes relacionadas, de alguna forma, con las [[brumas]].{{book ref|mb2|4}}
Antes de llegar a la capital, Sazed también se topó con [[Jastes Lekal]] con un ejército de más de veinte mil koloss. Sazed se mantuvo firme y consiguió salir del campamento llevando un mensaje a Elend. Su antiguo amigo quería el atium y estaba preparado para usar ese ejército para obtenerlo.{{book ref|mb2|15}}
Cuando Sazed llegó por fin a Luthadel, descubrió que la ciudad estaba siendo sitiada por otros dos ejércitos (uno de [[Casa Cett|Cett]] y otro de [[Straff]]) así que la armada de koloss que él
{{image|Sazed vs. Koloss by Lara Sarmiento.jpg|side=left|width=350px|Sazed
Tindwyl murió en la batalla, haciendo que Sazed llorara su muerte y dudara de sus religiones. Dejó de creer en estas y entró en una época de desesperación. Durante su luto, decidió continuar revisando las contradicciones presentes en la información sobre el Pozo y su poder, hasta que fue atacado por Marsh.{{book ref|mb2|57}} Marsh estaba a punto de matarle, pero, por error, le dio sus mentes de metal, que le concedieron poderes para enfrentarse a él hasta que [[Ham]] lo rescató.{{book ref|mb2|58}}
Devastado al completo por esos últimos acontecimientos, Sazed dejó Luthadel y se marchó al convento. Allí fue donde se percató de que las palabras que había leído habían sido cambiadas, y entendió entonces que solo las palbras inscritas en metal eran dignas de confianza. Su último ápice de fe se desvaneció en ese momento.{{book ref|mb2|epilogue}}
=== El Nuevo Imperio ===
|