18 636
ediciones
Szeth está ahora al servicio de un hombre llamado Took, que lo utiliza para ganarse la admiración de los trabajadores de las minas (y bebidas gratis) en los pequeños pueblos por los que pasan. Como demostración de la total obediencia de Szeth, le hace hacer varias cosas, como saltar y cortarse el brazo. Cuando le ordena a Szeth que se suicide, éste le informa de que no se le puede ordenar que se suicide, y vuelve a sus propios pensamientos. Los demás se sorprenden de lo refinado de su discurso y se sienten ligeramente incomodados, asociándolo con los ojos claros. Szeth reflexiona que su forma de hablar y sus ademanes bien pueden ser parte de la razón por la que sus amos nunca lo retienen por mucho tiempo, ya que sus amos saben que es capaz de mucho más de para lo que lo están utilizando, y que en muchos aspectos, es mucho más refinado e inteligente que ellos. Sin embargo, Szeth se deleita en su trabajo común, ya que significa que no está siendo utilizado para derramar más sangre.
A medida que pasa la noche y se hace evidente que los habitantes del pueblo ya no escuchan realmente las historias de Took, éste y Szeth se marchan. Sin embargo, al salir del pueblo, Took es asesinado por un grupo de matones, que se plantean vender a Szeth a los esclavistas. Entonces uno de ellos recoge la [[
== Segunda parte: Las tormentas iluminadoras ==
|