Susebron

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Susebron
por Shuravf
Familia Cónyuge Sisirinah Padres Madre
Capacidades	Retornado, Despertante, Sombra cognitiva.
Residencia	T'Telir
Nacionalidad	de Hallandren
Mundo natal	Nalthis
Universo	Cosmere
Primera aparición	El aliento de los dioses

“Cuando los demás miran a las personas, una puede parecerles a veces más hermosa que otra. Para mí no es así. Yo solo veo el color. Los ricos y maravillosos colores que componen todas las cosas y les dan vida. ”

—Susebron a Siri

Susebron, también conocido como Susebron V, es el rey-dios de Hallandren en Nalthis unos 300 años después de la Multiguerra. Es un Retornado y sus súbditos le dan dos o más alientos cada semana para mantenerlo con vida. Es el quinto rey-dios en los trescientos años transcurridos desde la Multiguerra.

Apariencia y personalidad

por Laurys L

Para más imágenes, ver /Galería.

“Todos esos cuentos son solo historias contadas por gente que vivió antes que nosotros. Lo que dicen sobre la humanidad es cierto. He observado y he visto cómo actúa la gente. Es extraño, para mí, interpretar estas cosas, pues no veo como los hombres normales. ”

—Susebron sobre su percepción de la belleza

Como Retornado, Susebron aparenta unos veinte años, mucho menos de los cincuenta que tiene. Se le describe con el pelo oscuro, los ojos negros y la piel pálida, aunque más tarde se revela que puede aprender a cambiar de aspecto a voluntad.

Es ingenuo, ya que ha crecido en una prisión virtual impuesta por sus sacerdotes. Confía mucho en ellos y se niega a creer que puedan desearle el mal (aunque cabe destacar que su fe en ellos resulta estar bien fundada). Su principal fuente de conocimiento sobre moralidad es un libro de cuentos que perteneció a su madre, cuya moral sigue de memoria. Más tarde, empieza a entender algunas cosas por sí mismo, aunque sigue aferrándose a las reglas del libro, lo que le hace honesto hasta la exageración. Susebron es muy devoto de las personas en las que confía, incluyendo a Siri y los sacerdotes, y se niega a abandonar a ninguno de ellos. Sin embargo, puede ser realista en su evaluación de los demás y es muy consciente de sus propios defectos como gobernante.

Es muy aficionado a los dulces y justifica comer muchos diciendo que, como Retornado, no puede engordar.

Atributos y habilidades

por Caio Santos

Usando el despertar

Durante la mayor parte de su vida, Susebron fue mudo e incapaz de leer o escribir con el alfabeto común. Sin embargo, entendía la escritura de los artesanos de Hallendren, codificada por colores, que era el único medio de comunicación entre Susebron y sus sacerdotes. Como no le enseñaron a despertar mentalmente, fue incapaz de usar su aliento para hacerlo. Con el tiempo, consigue aprender a leer y escribir con Siri, y Sondeluz le devuelve la lengua, adquiriendo inmediatamente la capacidad de hablar.

Ha sido dotado con el Tesoro de Dalapaz, una suma de aproximadamente cincuenta mil alientos. Además, recibe de dos a tres alientos cada semana, lo que hace que su reserva de estos aumente constantemente con el tiempo. Esto le otorga la Décima Elevación y todas las habilidades de las Elevaciones inferiores, entre las que se incluyen:

• Reconocimiento de aura – le permite conocer el número de alientos que posee una persona–.
• Tono perfecto.
• Perfecto reconocimiento del color – le permite determinar instantáneamente e instintivamente los tonos exactos de color y sus armonías tonales–.
• Perfecto sentido vital – le permite percibir a las personas que le rodean–.
• No envejecimiento – le hace inmune a la mayoría de toxinas y males físicos, convirtiéndole funcionalmente en inmortal.
• Despertar instintivo: le permite conocer los Mandatos necesarios para lo que desea hacer sin aprendérselos de antemano.
• Reconocimiento de aliento investido: le permite reconocer el aura de los objetos y saber cuándo algo ha sido investido con aliento a través de un despertante.
• Ruptura de Mandatos - le permite anular instintivamente Mandatos en otros objetos Investidos, incluyendo los sinvida. Esto requiere concentración y le dejará exhausto.
• Gran despertar: le permite despertar objetos de piedra y acero.
• Mandato audible: le permite despertar objetos que no está tocando físicamente, pero que están al alcance del sonido de su voz.
• Distorsión del color: dondequiera que vaya Susebron, los objetos blancos que se encuentran a su alrededor rompen sus colores como un prisma, creando otros colores. Para demostrarlo, suele vestir de blanco en actos públicos, aunque en privado viste de negro, ya que es un color más poderoso desde el punto de vista del Despertar.
• Invocación perfecta: al despertar, drena el color de los objetos hasta convertirlos en blancos en lugar de grises.
• Mandato mental - esta habilidad, difícil de aprender, le permite emitir Mandatos y despertar mentalmente. Susebron habría podido despertar objetos gracias a esta habilidad antes de que le curaran la lengua, pero nunca le enseñaron a hacerlo.
• Hay rumores de otros poderes otorgados por la Décima Elevación que no son comprendidos o no han sido dados a conocer por los reyes-dioses, que han sido los únicos en conseguirlo.

El Tesoro de Dalapaz hace a Susebron prácticamente inmortal, e incluso si de repente se quedara sin su suministro semanal, podría vivir más de novecientos años alimentándose sólo de él. Esta cantidad de aliento también podría hacerle inmune a la alomancia emocional. Además, como rey-dios, es capaz de usar su Aliento Divino para curar a varias personas en lugar de sólo a una. No se sabe si esto se debe a que fue un Retornado joven o a algún efecto secundario de poseer el Tesoro de Dalapaz.

Aunque poco se ha mostrado de las habilidades despertantes de Susebron, él es por naturaleza extremadamente poderoso gracias al gran número de alientos que posee. Poco después de recuperar su lengua, era capaz de controlar cientos de objetos despertados al mismo tiempo.

Aunque es rey, no se sabe con certeza si tiene dotes políticas, ya que hasta hace muy poco ha sido poco más que una mera representación del sacerdocio.

Historia

Infancia y primeros años de vida

Susebron fue un niño Retornado cincuenta años antes de la rebelión Pahn Kahl]]. Nació en el seno de una familia pobre que vivía muy al norte, en Hallandren, hijo de un mercader y su esposa. En el momento de su Retorno, el entonces rey-dios era incapaz de tener un hijo, por lo que el pequeño Susebron recibió el Tesoro de Dalapaz y se convirtió en el nuevo rey-dios después de que su predecesor renunciara a su Aliento Divino para curar una plaga. En algún momento, antes o después de su coronación, le extirparon la lengua para que no pudiera utilizar la gran cantidad de alientos que le habían sido otorgados. Su madre lo crió en palacio, aunque con el tiempo "se la llevaron". A lo largo de los años, consiguió conservar un libro de cuentos que ella solía leerle; había oído las historias tantas veces y las había mirado tantas veces que había memorizado cada símbolo, y la moraleja de las historias del libro era en parte el código por el que vivía.

Durante la mayor parte de su vida, Susebron residió casi siempre solo en el palacio negro de los reyes-dioses en T'Telir. A pesar de ser el gobernante oficial de Hallandren, se mantenía alejado de su gente y de otros Retornados, y sólo salía brevemente en ocasiones especiales para ocultar el hecho de que era mudo. Por aquel entonces, no se le había enseñado a despertar mediante el pensamiento.

Matrimonio con Siri

por Marie Seeberger

Siri arrodillada ante Susebron

“No creo que se suponga que los reyes-dioses sean «dulces». ”

—Susebron mostrando su desconocimiento de términos metafóricos

Para evitar una guerra entre Idris y Hallandren, se prometió a Susebron la mano de la hija del rey Dedelin, Vivenna. En el último momento, sin embargo, fue cambiada por su hermana, Sisirinah, y Susebron acabó casándose con esta. Durante mucho tiempo, Susebron y Siri sólo se veían por la noche, ya que los sacerdotes querían que tuvieran un hijo, pero ninguno de los dos actuaba, ya que Siri esperaba el primer movimiento de Susebron mientras que Susebron no tenía ni idea de lo que se esperaba de él. Al principio, no entendía a Siri, no sabía por qué pasaba las noches esperando desnuda en su piso. Después de casi una semana de esta rutina, Siri se le acercó y le recriminó que no hubiera hecho otra cosa que mirar durante toda la semana anterior. Cuando Susebron se acerca, se revela que no tiene lengua. Siri, para convencer a sus sacerdotes de que estaban intentando tener un bebé, empezó a gemir y a botar en la cama todos los días, imitando cómo creía que sonaba una relación sexual. Después de que ella comenzara a realizar su rutina de gemidos y gritos para los sacerdotes, él se acercó a ella con un libro, con la esperanza de iniciar alguna comunicación.

Siri enseñó a Susebron a leer y escribir utilizando el libro de cuentos de su madre, y empezaron a conversar, él escribiendo en una pizarra y ella hablando. Mientras ambos planeaban cómo revelar a los demás dioses que no tenía lengua, empezaron a enamorarse. Pasaba largas horas con ella, aprendiendo cosas como el sarcasmo y la burla, sobre lugares como Idris, y sobre la vida de Siri mientras crecía. Durante una de estas conversaciones, Susebron expresó su interés por conocer a Austre. Con el tiempo, él y Siri consumaron su matrimonio.

La rebelión Pahn Kahl

Para más información, ver rebelión Pahn Kahl.

Después de que Siri le convenciera, Susebron decidió revelar finalmente su verdadera función en la corte a los otros dioses, con el plan de huir con Siri y Dedos Azules en caso de fracasar. Sin embargo, antes de que ninguna de las dos cosas pudiera ocurrir, Siri fue raptada por los sacerdotes bajo el pretexto de su embarazo obligándola a permanecer recluida. Casi inmediatamente después, los pahn kahl atacaron la Corte de los Dioses, y encarcelaron tanto a Siri como a Susebron.

Éste se encontró en una celda junto a Sondeluz, que sacrificó su propio Aliento Divino para curarlo, devolviéndole la lengua. Ahora que podía hablar, y armado con suficientes alientos que le permitieron despertar instintivamente, Susebron liberó su palacio de los invasores pahn kahl y salvó a Siri.

Poco después de sofocar la rebelión, Susebrón fue abordado por Vasher, quien le dio el Mandato de los Fantasmas de Kalad esparcidos por la ciudad. Lo utilizó para enviar a las estatuas tras el ejército sinvida, que se abalanzaba sobre Idris. Él mismo permaneció en T'Telir junto con Siri, ahora con mucha más influencia en la política de Hallandren.

Relaciones

por Elisgardor

Con Siri

Siri

“No hay nada tan maravilloso como tú, ni siquiera en mi propia corte. Las montañas deben de ser realmente especiales, para producir tanta belleza. ”

—Susebron a Siri

Siri y Susebron están casados. Aunque el propósito de su matrimonio es consolidar alianzas políticas y cumplir el acuerdo entre Hallandren e Idris establecido dos décadas antes, llegan a amarse profundamente. En un principio, Siri no estaba destinada a ser la esposa de Susebron a través del acuerdo; en su lugar, su hermana mayor Vivenna fue preparada toda su vida para casarse con el rey-dios. Sin embargo, cuando Vivenna cumple veintidós años y llega el momento en que debe viajar a Hallandren para casarse con Susebron, su padre, el rey Dedelin, decide enviar a Siri en su lugar. A pesar del terror inicial de Siri ante la perspectiva de su matrimonio con Susebron, ambos entablan una amistad que rápidamente se convierte en amor.

Desarrollo

¡Esta página o sección contiene detalles del trabajo (sin publicar) Mythwalker!

Esta información puede destripar algunos elementos de la trama de cualquier libro publicado. También debe considerarse como no canon y que puede cambiar por completo en el futuro

Siri, Vivenna y Susebron se desarrollaron juntos. Originalmente, todos ellos eran personajes de Mythwalker, la novena novela inédita de Brandon. Susebron no tenía nombre en Mythwalker, sólo se llamaba Emperador, pero también iba a casarse con Vivenna (Vvenna en Mythwalker) antes de hacerlo con Siri.

El Emperador en Mythwalker conserva el mismo estatus divino que Susebron, pero los detalles son ligeramente diferentes: es significativamente más joven, ha sido coronado a la edad de diez años en lugar de poco después de su nacimiento, y viste de negro en lugar de blanco en la corte. Tampoco es un Retornado, ya que el despertar aún no existía en su forma actual.

Aunque el Emperador está presente en la boda de Siri con él (a diferencia de Susebron), sus primeros encuentros con ella son muy parecidos a los de El aliento de los dioses. Sin embargo, como la Siri de Mythwalker posee poderes que le permitirían hacer crecer de nuevo su lengua, la trama requiere que ambos permanezcan en ese estado inicial de incomunicación durante mucho más tiempo que ahora.

Aunque Brandon nunca terminó Mythwalker, la incipiente relación entre Siri y el Emperador era una de sus partes favoritas de la historia, y por eso la retomó en El aliento de los dioses. Aunque su trama se reescribió de forma significativa para mejorar el ritmo, la personalidad del Emperador no cambió cuando se convirtió en Susebron.

Curiosidades

• Varias personas enviaron un correo electrónico a Brandon diciendo que, al carecer de lengua, Susebron no debería tener el sentido del gusto. Sin embargo, se trata de una idea errónea nacida de una leyenda urbana muy extendida según la cual las papilas gustativas están segregadas por sabores en la lengua de una persona, mientras que en realidad, el paladar también las tiene.
• Aunque Susebron cree haber ocultado su libro de relatos a los sacerdotes, éstos son conscientes de ello, aunque deciden dejar que lo conserve como recuerdo.
• Según Brandon, puede que Susebron no sea un buen rey-dios, pero sin duda será uno honrado. Es posible que Llarimar se convierta en su sumo sacerdote.
• Aunque Susebron podría aparecer en la secuela de El aliento de los dioses no será el centro de la historia.

Notas

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