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Diferencia entre revisiones de «Eshonai»
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Aunque ella acepta sus deberes como general de su gente, se siente atrapada y restringida por su papel y por vivir en las [[Llanuras Quebradas]]. Incluso su uniforme contribuye a su malestar emocional, y las tareas repetitivas de su vida militar nublan su mente. Culpa a su uniforme de sus preocupaciones personales, sin embargo, nunca habla del desasosiego de su rol. Disfruta del sentimiento de fortaleza que obtiene al llevar la armadura esquirlada, lo que le da algo fiable en el mundo.{{book ref|sa2|i|1}}{{book ref|sa2|i|4}}
La verdadera pasión de Eshonai es la exploración, y anhela ser libre del papel de general para poder explorar, incluso cuando era una niña, era común para ella perderse a la mitad de una tarea si algo llamaba su atención.{{book ref|sa2|i|1}}{{book ref|sa3|prologue}} Incluso consideraba explorar civilizaciones humanas, aunque tenía preferencia por la naturaleza. Sin embargo, cree que esos sentimientos son insignificantes en comparación con la importancia de proteger a su pueblo. Sostiene que recordar a los caídos es importante, pero menos preocupante que proteger a los vivos. Llega tan lejos como para acompañar a sus fuerzas de asalto
Eshonai se cree personalmente responsable de la Guerra de la Venganza, ya que ella fue la primera en hacer contacto con los alezi. A pesar de ser plenamente consciente de la nefasta situación de su pueblo, no culpa a los alezi de su búsqueda de venganza. Si bien lucha contra ellos por necesidad, preferiría, y de hecho intenta, negociar la paz.{{book ref|sa2|i|1}}{{book ref|sa2|i|4}}
Eshonai fue la primera en adoptar la [[forma tormenta]] después de que su hermana [[Venli]] la volviera a descubrir, a pesar de ser reacia a hacerlo. La nueva forma causó que Eshonai se volviera más beligerante y destructiva, lo que la llevó a cambiar su postura de buscar la paz con los alezi a desear su exterminio. Su nueva personalidad agresiva la hizo estar más dispuesta a matar a los oyentes disidentes, incluidos sus camaradas, amigos y familia. Cualquiera que se rehusara a seguir sus órdenes acabaría apartado por Eshonai, cuya intención era matarlos a todos.{{book ref|sa2|i|11}}{{book ref|sa2|i|4}}{{book ref|sa2|i|5}}{{book ref|sa2|i|8}}
En la [[Batalla de Narak]], ella lideró al ejército oyente, quienes habían tomado la forma tormenta para pelear, con la intención de destruir a las fuerzas alezi.{{book ref|sa2|i|13}} Después de que [[Adolin]] la empujará al abismo,{{book ref|wor|84}} se estrelló su armadura contra el suelo, en un intento de no ser arrastrada por la crecida del agua de la tormenta. Gracias a sus esfuerzos, Eshonai no se ahogó, sino que murió poco después a causa de las heridas infligidas durante su lucha por la supervivencia en el abismo.{{book ref|sa4|117
Tras su muerte, el [[Padre Tormenta|Jinete de las Tormentas]] detuvo brevemente su alma para que no entrara al [[Más Allá]], con el fin de permitirle que cabalgara los vientos de todo Roshar mientras la [[alta tormenta]] azotaba el continente.{{book ref|sa4|117}}
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