Tonos iridiscentes
| Tonos iridiscentes | |
|---|---|
| Relacionado con | Hallandren, Retornados |
| Tipo | Religion |
| Mundo de origen | Nalthis |
| Universo de origen | Cosmere |
Los Tonos Iridiscentes es una religión politeísta practicada en Hallandren.[1] Esta religión enseña que los Retornados son dioses.
Enseñanzas
Dalapaz y Kalad
Dalapaz ocupa un lugar central en los Tonos Iridiscentes. A menudo se le conoce como Dalapaz el Bendito, aunque algunos sacerdotes le llaman Pacificador.[2] Muchos hallandrenses también lo consideran un dios de dioses. A veces, aunque no siempre, se considera que fue el primer rey-dios.[3] Los Hallandren consideran su nombre sagrado. También consideran a Dalapaz como el que les dio la vida.[2]
Los hallandrenses creen que el Pacificador volvió a la vida con un propósito específico, detener el conflicto entre los hombres y traer la paz a Hallandren. También creen que les dio la Luz de la Paz,[2] diciéndoles que la mantuvieran a salvo,[2] así como que nunca la usaran.[2] En su teología, el Pacificador murió para dar su aliento a los hallandrenses. Pero también exigió que se guardara por si volvía y lo necesitaba.[2] Creen que es muy importante que el aliento no sea usado.
Los hallandrenses ven a Pacificador como una figura sagrada y un dios porque los protegió de Kalad,[2] expulsándolo y salvando al pueblo de Hallandren. También trajo la paz al mundo al detener la Multiguerrra.[3]
Kalad también ocupa un lugar central en los Tonos Iridiscentes. Se le considera malvado y destructivo.[2] Los hallandrenses creen que la familia real de Hanald se alineó con Kalad,[3] ignorando la voluntad del pueblo y buscando la guerra con sed de sangre.[3]
Fue el creador de los Fantasmas de Kalad,[3] un nuevo y más poderoso tipo de sinvida.[3] Aunque nadie recuerda qué tipo de sinvida eran,[3] se les considera aterradores y terribles.[3] Mucha gente cree que después de que Dalapaz los enviara lejos, los Fantasmas de Kalad aún vagan por la jungla, esperando a que Kalad regrese.[3]
La onda iridiscente y el más allá
Los hallandrenses creen que cuando una persona muere salta a través de una cosa llamada la 'Ola Iridiscente'.[4] Cuando una persona decide Retornar, salta de nuevo al mundo de los vivos, aunque este proceso deja la memoria fragmentada.[4]
Hay una vida después de la muerte o el cielo,[5] y la gente está en paz aquí. En la otra vida el futuro es visible, como un pergamino.
Fiestas y maldiciones
Hay una fiesta conocida como la Fiesta de los Dioses, en la que la gente se toma la noche libre y festeja junta.[6] La Celebración de la Boda es una fiesta de una semana de duración en la que los hallandrenses celebran el matrimonio del rey-dios.[7] Durante este tiempo, la reina no puede abandonar el palacio.[7] Al final de esta fiesta, la reina es presentada oficialmente a la Corte de los Dioses.
Los hallandrenses suelen utilizar maldiciones relacionadas con los colores o los Tonos Iridiscentes. No maldicen con los nombres de sus dioses.[8] Esto se debe a que a la mayoría de los dioses no les gusta que sus nombres se utilicen como juramento.[8] Las maldiciones conocidas incluyen:
- Santo Dios de los Colores
- ¡Colores!
- Bendito Señor de los Colores
- En nombre de los Tonos Iridiscentes
- Por el amor de los Colores
- ¡Por los dantasmas de Kalad!
Los Retornados
El Retorno
Algunas personas mueren de una manera que ejemplifica las grandes virtudes de la existencia humana[1], como la valentía o la honestidad.[1][9] Estas personas son enviadas de vuelta por los Tonos Iridiscentes. Los hallandrenses creen que los Retornados son enviados de vuelta para actuar como ejemplos, y como dioses, para los vivos. La religión enseña que cada dios representa un ideal relacionado con la forma en que murieron.[1]
Deberes
“There was nothing to fear from the Returned gods of the Hallandren. The gods were a blessing. They provided visions of the future, as well as leadership and wisdom. All they needed to subsist was one thing. Breath.”
—Enseñanzas de Llarimar
Cuando un seguidor busca una bendición puede enviar una ofrenda a uno de los dioses,[1] normalmente el dios correspondiente a lo que el seguidor desea.[1] Estas ofrendas suelen adoptar la forma de un cuadro u otro tipo de arte,[1] como un poema.[1] Los sacerdotes graban las palabras del dios y hacen una interpretación de lo que piensa, ya sea para bien o para mal, y se lo entregan al mecenas.[1] Incluso el mero hecho de enviar una ofrenda te proporciona algo de buena fortuna,[1] aunque cuanto mejor sea la calificación de tu ofrenda, mejor suerte obtendrás.[1] La mayoría de los mecenas no hacen sus ofrendas ellos mismos,[1] sino que pagan a alguien para que lo haga por ellos.[1] Esto significa que cuanto más esté dispuesto a pagar un mecenas, mejor será su ofrenda y mayor será su suerte.[1] Las ofrendas se hacen específicamente para el dios al que van dirigidas, y sólo ellos, además de algunos de sus sacerdotes, pueden verlas.[1]
Otro deber de los Retornados son las peticiones.[4] Cualquiera puede acudir a hacer peticiones a los dioses. Normalmente estas personas piden curación,[4] aunque no siempre para ellos mismos,o a veces piden otras cosas, como un trabajo.[10] Las peticiones ofrecen una última, aunque improbable esperanza, porque un día uno de los seguidores recibirá un milagro.[4] Se supone que las peticiones ayudan a los dioses a recordar por qué Retornaron.[4]
Los Retornados también proporcionan liderazgo a los hallandrenses. Esto se manifiesta en las votaciones de los Retornados. Los dioses se dividen en subgrupos,[11] cada uno con responsabilidad sobre un área determinada.[11] Algunos dioses se encargan de asuntos cívicos;[11] otros rigen acuerdos y tratados, etc.[11] Luego votan durante las asambleas. Durante una asamblea principal, todos los dioses se reúnen y votan sobre un tema. El resultado se conoce como la voluntad del panteón.[12] Los Retornados tienen derecho a desobedecer la Voluntad del Panteón.[12]
Habilidades
Los hallandrenses atribuyen muchas habilidades a los Retornados,[9] algunas ficticias y otras reales.[9] Ejemplos son cosas como controlar la lluvia, pero también como no poder volverse loco o tener dolores de cabeza. Los Hallandren creen que los Retornados tienen objetivos que quieren alcanzar.[4]
Denying a request from one of the Returned will cause great peril to your soul.[13] The Returned are believed to be able to take your soul,[13] although this is different then the Idrian belief of them sucking breath from people. It is also considered improper for a Returned to stoop.[13]
It is also believed that the Returned have prophetic dreams, which is at least partly true.[1] The high priest of each god writes down the dreams of their god the moment that god wakes up.[1] The Returned are also considered to be wise.[1] As the Returned are oracles it is very important that they don’t interact with the subject of their predictions, for if they do it could unbalance a great many things.[13]
The God King
The First God King is believed to have received his Breath and life from Peacegiver himself.[3] Since that day, each God King has fathered a stillborn son who then Returned and took his place. It is unknown to the Hallandren how Peacegiver made the first God King,[3] as Breath does not make the recipient divine.[3]
The God King is special, beyond being a Returned.[14] The doctrines teach that the earth itself is too base for him.[14] He achieved transcendence before he was born, but Returned to bless his people.[14] The God King also represents all Colors.[14] When a new God King is chosen, his servants are replaced.[15]
The God King’s will is law,[16] due to this he needs no reason or justification for what he does.[16] No one, except for the queen and a number of dedicated servants, are allowed to touch him.[14] It is believed that the God Kings can heal more then one person, as opposed to a normal Returned.[17]
The Priesthood
The Iridescent Tones have many priests.[16] These priests have mostly religious responsibilities, although they also rule the empire in the name of their King. The main job of the priests is to care for the Returned.[1] This includes making sure that the Returned have enough food and drinks to enjoy, dressing then etc. The priests organize the interactions between the Returned and the citizens, including the weekly offering of Breath that the Returned require to survive[1] and the daily hearing of petitions.[4] There usually isn’t a moment when a Returned is without his priests. Priests are also allowed to argue in the arena, this serves to keep the gods informed of the common people’s opinions.[11] Priests don’t take pay for their services.[18] Priests can’t say anything about the life before their god returned.[19] It is a sacred tenet that the servants of a god don’t repeat what they hear in confidence.[3]
All priests wear robes,[1] and some priests, likely the more important ones, wear miters.[1] It seems the more important one is the more intricate ones robe and miter becomes. The robes of the priests are the colors of their god,[1] with the God King’s priests wearing different colours everyday[17]
The priests of the God King know that the God King cannot bear a child.[20] Instead they pronounce the queen pregnant and act like she gave birth to a Returned baby, who previously Returned somewhere else in the empire.[20]
High Priests
Each of the Returned, including the God King, has a high priest.[1][16][4] These priests wear intricate robes and miters.[16] Their robes are the same colours as their god.[1] To become a high priest you have to study theology.[4] The God King’s High priest is formally addressed as ‘Your Excellency‘.[2] It is unclear whether all high priests have this title, or just the God King’s high priest.
The high priests are almost always near their gods. They are also one of the few priests allowed to see the offerings.[1] Some high priests argue in the arena,[11] although this isn’t restricted to high priests, and they aren’t obligated to.[11] During a main assembly the high priests are responsible for communicating their god’s opinion to the public,[12] and the other gods.[12] It is customary to kneel down in front of their god, and ask for an answer.[12] When they have an answer they will join the other high priests,[12] carrying either a green flag for a favourable response[12] or a red flag for dissatisfaction.[12]
History
The Manywar
The Hallandren believe that sometime around the year 0 Kalad Returned and aligned himself with the Royal Family of Hanald, seeking war with the other Nalthian Nations.[3] He made a large and terrifying army of lifeless called Kalad’s Phantoms, who live on in Hallandren mythology.[3]
Eventually Kalad seized control of Hanald and declared war on a number of nations, starting an incredibly destructive war, this war would play a major role in Hallandren mythology.[3] Lore holds that it was during this time that Peacegiver Returned. He then defeated Kalad[21] and seized control of Kalad’s Phantoms.[3] He immediately sought to end the war with diplomacy, in which he succeeded, saving Hallandren and a number of other nations from doom.[22]
The Hallandren felt betrayed by Austre,[2] who they believed had abandoned them to Kalad,[2] because of this and them being saved by Peacegiver they started worshipping the Returned. During this time the Cult of Returned, which was already worshipping the Returned, rose to prominence and eventually evolved into the Iridescent Tones.[23]
The God Kings
Eventually Peacegiver bestowed his Breaths onto a priest called Susebron. Ordering the priesthood to keep his breaths safe, and to never use them, until he came back and reclaimed them.[2] This priest would become the first God King. The priests took Peacegiver’s command seriously, cutting out the tongue of the God King, and would continue to do so for the next 300 years.[22]
After this first King four more God Kings would reign,[3] all of them called Susebron. Each God King would bear the Light of Peace, and add to it.[21]
Notes
- ↑ a b c d e f g h i j k l m n o p q r s t u v w x y z El aliento de los dioses capítulo 3#
- ↑ a b c d e f g h i j k l El aliento de los dioses capítulo 40#
- ↑ a b c d e f g h i j k l m n o p q r El aliento de los dioses capítulo 32#
- ↑ a b c d e f g h i j El aliento de los dioses capítulo 12#
- ↑ El aliento de los dioses capítulo 23#
- ↑ El aliento de los dioses capítulo 22#
- ↑ a b El aliento de los dioses capítulo 8#
- ↑ a b El aliento de los dioses capítulo 38#
- ↑ a b c El aliento de los dioses capítulo 14#
- ↑ El aliento de los dioses capítulo 42#
- ↑ a b c d e f g El aliento de los dioses capítulo 16#
- ↑ a b c d e f g h El aliento de los dioses capítulo 50#
- ↑ a b c d El aliento de los dioses capítulo 26#
- ↑ a b c d e El aliento de los dioses capítulo 6#
- ↑ El aliento de los dioses capítulo 34#
- ↑ a b c d e El aliento de los dioses capítulo 4#
- ↑ a b El aliento de los dioses capítulo 24#
- ↑ El aliento de los dioses capítulo 49#
- ↑ El aliento de los dioses capítulo 18#
- ↑ a b El aliento de los dioses capítulo 55#
- ↑ a b El aliento de los dioses capítulo 15#
- ↑ a b El aliento de los dioses capítulo 58#
- ↑ El aliento de los dioses epílogo#